▪Es un honor anunciar que, una vez cumplidos los trámites legales exigidos por el Ministerio del Interior, éste ha procedido a legalizar nuestra formación política con plenos derechos.
▪Hoy nace una nueva esperanza para nuestra tierra. Una esperanza de justicia, riqueza, desarrollo y libertad. Una esperanza que cambie la historia de Extremadura para siempre y así ningún extremeño tenga que volver a emigrar de su propia tierra.
▪Nacimos como una ilusión a través de las redes sociales. Nuestra dialéctica valiente, directa, sin cobardía ni falso buenismo nos ha llevado a liderar éstas y a ser la realidad política que hoy somos. Una realidad política única en valores y proyectos que aspira a que nuestros hijos vivan en una Extremadura infinitamente mejor a la que nos ha tocado vivir.
▪Nuestros principios son claros y no negociables. Queremos construir una sociedad rica y desarrollada lejos de la miseria, la corrupción, el enchufismo clientelar y la pobreza estructural a la que cuarenta años de régimen socialista han condenado a nuestra tierra. Queremos cambiar este modelo donde el motor de la economía es un organismo político oscuro con una estructura ineficaz e insostenible como es la Junta de Extremadura por un modelo capitalista que convierta nuestra tierra en una región competitiva, atrayente para los negocios y la inversión. Con las mejores infraestructuras posibles, en la cual el dinero público se destine al desarrollo de nuestra tierra y el bienestar de nuestras familias, no para mantener a toda la aberrante y demencial estructura política y administrativa autonómica. Donde los impuestos sean los justos y necesarios, llena de fábricas y empresas que pongan fin al paro, una de las mayores lacras de la izquierda sufrida por nuestro pueblo; pues no existe mejor programa social que un puesto de trabajo.
▪No nos olvidamos de la situación tan terrible que viven las familias extremeñas, muchas de ellas con todos sus integrantes desempleados, ni de la pobreza infantil que afecta a decenas de miles de niños extremeños. No cesaremos en nuestro empeño hasta revertir esta terrible situación y nos comprometemos a desterrar la hispanofobia de quienes nos gobiernan invirtiendo hasta el último céntimo disponible en ayudar al pueblo extremeño. Tampoco olvidamos esas leyes retrógradas que interfieren en la libertad y los derechos de las familias. Todas y cada una de ellas serán derogadas y sustituidas por aquello que más odia quienes las crearon: la libertad de la familia y su independencia frente al Estado.
▪Por último, trabajaremos sin descanso hasta alcanzar un nuevo marco político para Extremadura. Ni aceptamos ni vamos a tolerar que nuestra tierra tenga menos competencias u oportunidades que el resto de regiones de España. O que se niegue al pueblo extremeño los derechos de los que sí disfrutan otros. Vamos a crear una sociedad de ciudadanos libres e iguales, no como la actual de amos y esclavos.
▪Ha llegado el momento de poner fin a todo aquello que nos ha empobrecido, que nos ha humillado como pueblo y construir una nueva Extremadura de la que nuestros hijos puedan sentirse enormemente orgullosos.
¡VIVA EXTREMADURA!
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